Foto: Archivo referencial
Mucho se ha escrito y discutido en años recientes sobre los peligros de la práctica de deportes como el fútbol americano o el hockey, pero un estudio publicado en la revista Sports Health señala que, si se evitan las lesiones, las actividades atléticas mejoran la salud cerebral.
La investigación la dirigió Nina Kraus, directora del Laboratorio de Neurociencia Auditiva en la Universidad Northwestern, quien se enfocó en los beneficios de la práctica del deporte en el procesamiento sensorial, más allá de los que se reconocen para la salud física, cardiovascular y mental.
“Nadie disputaría el hecho de que los deportes conducen a una mejor aptitud física, pero no siempre pensamos acerca de la aptitud cerebral y los deportes”, indicó Kraus.
“Lo que afirmamos -agregó- es que con la práctica de deportes puede sintonizar el cerebro para una comprensión mejor del entorno sensorial”.
La preocupación tanto en los deportes profesionales como en los escolares, compartida por entrenadores, médicos y familias, ha girado principalmente en torno a deportes como el fútbol americano, el fútbol, el boxeo o el hockey, donde los atletas reciben repetidos impactos en la cabeza o rudos encontronazos en el resto del cuerpo.
El estudio se enfocó en el procesamiento auditivo y en él Kraus encontró que los atletas tienen una capacidad mayor para silenciar el ruido electrónico de fondo en sus cerebros a fin de procesar mejor otros sonidos como la llamada de atención de un compañero de equipo o las instrucciones del entrenador desde afuera de la cancha.
Para su estudio, los investigadores observaron a 495 estudiantes participantes en 19 equipos de la división atlética de la universidad y otros 493 estudiantes no atletas, con igual proporción de hombres y mujeres, y compararon la amplitud de sus respuestas y la amplitud del ruido de trasfondo.
El equipo científico dio a los participantes sílabas mediante audífonos y registró la actividad de sus cerebros con electrodos adheridos al cuero cabelludo. Los atletas tuvieron mejores respuestas que los no atletas a las sílabas en comparación con el ruido de trasfondo.
“Imagínese el ruido eléctrico de trasfondo en el cerebro como la estática en una transmisión radial”, explicó Kraus. “Hay dos formas de escuchar mejor al DJ: se minimiza la estática o se aumenta el volumen de la voz del disc-jockey”.
“Lo que encontramos es que el cerebro del atleta minimiza la ‘estática’ de trasfondo para escuchar mejor al ‘DJ'”, dijo Kraus.
Esta forma de realce puede estar conectada con el nivel general de aptitud de los atletas y la necesidad de un atleta de captar y responder a los estímulos auditivos durante la competencia, escribieron los autores.
El compromiso serio con una actividad física “al parecer engrana con un sistema nervioso más calmado”, señaló la investigadora. “Y, quizá, si el atleta tiene un sistema nervioso más sano será capaz de manejar mejor las lesiones y otros problemas de salud”.
Al igual que los deportistas, los músicos y las personas que pueden hablar más de un lenguaje tienen una mayor capacidad para escuchar las señales de sonidos, según Kraus. La diferencia es que los músicos y las personas multilingües lo hacen aumentando el sonido en sus cerebros en lugar de acallando el ruido de trasfondo.
“Todos ellos escuchan mejor al ‘DJ’ pero los músicos lo hacen porque suben el volumen del ‘DJ’ en tanto que los atletas escuchan mejor al ‘DJ’ porque pueden acallar la ‘estática'”. EFE