Dos jugadores de la liga de los Estados Unidos dieron una gran enseñanza de compañerismo, tras discutir en el momento que su equipo tenía un tiro libre a favor, al final terminaron abrazándose y celebrando juntos.
En un principio el cobro iba a ser ejecutado por el jugador con la camiseta número 9 pero llegó el número 18 a interrumpir su ejecución ya que él lo quería patear.
Finalmente el primer jugador terminó realizando el cobro anotando el gol para el club logrando que esta situación no los enemistó y en cambio celebraran entre todos el emocionante momento.
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