El informe señala que los cultivos de coca crecieron un 10 % en Colombia en 2023 y alcanzaron las 253.000 hectáreas, lo que supone 23.000 más que en 2022.
El presidente Gustavo Petro, criticó el informe de la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito, que indica un aumento en la producción de cocaína en Colombia en 2023, y dijo que le deja “dudas”.
Así lo manifestó el jefe de Estado en una ceremonia de graduación de policías realizada en la Escuela de Cadetes de la Policía General Francisco de Paula Santander, en Bogotá.
Según Petro lo que su Gobierno pretende es dificultarles el negocio para que no fuera rentable pero “el informe de la ONU sobre el año 2023 dice que la productividad de la hoja de coca se duplicó en un año, eso es lo que me da dudas porque no he observado ningún cultivo en el mundo que se duplique en un año”.
Le puede interesar: Gobierno publica borrador de reglamentación de uso de coca para fines médicos en el país
“Es decir, que la misma área sembrada, que tiene un poquito más de hectáreas, produce el doble en el 2023 que en el 2022”, criticó Petro.
Un informe presentado el pasado 18 de octubre en Bogotá por la Unodc señaló que los cultivos de coca crecieron un 10 % en Colombia en 2023 y alcanzaron las 253.000 hectáreas, lo que supone 23.000 más que en 2022, mientras que la producción de cocaína aumentó un 53 %.
El documento señala que el área sembrada con coca a 31 diciembre de 2023 fue de 253.000 hectáreas, mientras que la producción de clorhidrato de cocaína pura subió a 2.664 toneladas, cifra que en 2022 fue de 1.738 toneladas.
Según Petro, el informe dice que la producción de cocaína aumentó por culpa del Gobierno pero lo que pasa en realidad es que los narcotraficantes han reemplazado las matas de coca por unas de mejor rendimiento.
“Son capaces (los narcotraficantes), tienen el dinero, pueden coger la biotecnología y la genética y adaptar las plantas para que den más cocaína”, aseguró.
En su intervención, Petro advirtió que las cifras evidencian las dificultades de la guerra contra el narcotráfico, pues los esfuerzos en incautaciones no equiparan la producción de coca.
“Cada vez incautamos menos de lo que se produce”, dijo y aseguró que “hay que cambiar de estrategia, de táctica y de relaciones internacionales. Este es un problema de América, y su consumo se ha vuelto un problema global”.
Igualmente criticó lo que ha llamado política fracasada en la lucha contra las drogas y aseguró: “Estamos en una guerra de nunca acabar si no cambiamos la política. Si no lo hacemos, vamos a seguir matándonos entre nosotros”.
Por otro lado el gobernante colombiano aseguró que la demanda de drogas ilícitas aumentó en varios países, entre ellos China e India y que esto también ha influido en los resultados negativos para Colombia.
EFE