El Ministerio de Sanidad controlado por el movimiento islamista Hamás en la Franja de Gaza acusó a la Autoridad Nacional Palestina (ANP) de suspender los traslados médicos de los gazatíes a hospitales de Israel, Cisjordania y Jerusalén Este.
Al menos once pacientes, incluidos cuatro recién nacidos, murieron en los últimos tres días por no haber podido viajar para recibir tratamiento médico, según un comunicado del Ministerio.
La ANP se encarga de costear los traslados de los pacientes de Gaza, principalmente de cáncer y enfermedades crónicas que necesitan asistencia urgente, a centros hospitalarios fuera del enclave costero.
Israel mantiene a Gaza bajo bloqueo desde 2007 e impone restricciones sobre la entrada de materiales de construcción, maquinaria y otros bienes, incluidos productos médicos, que afecta al desarrollo de la asistencia sanitaria para sus dos millones de residentes.
El presidente palestino, Mahmud Abás, ha aplicado recientemente una serie de medidas financieras contra el movimiento islamista en la Franja, que incluyen el recorte del 30 % de los salarios de sus funcionarios y de parte de la financiación para la energía eléctrica que envía Israel al enclave costero, reseñó Efe.
El objetivo de Abás es presionar a Hamás para que ceda el poder territorial en Gaza, que controla desde 2007, cuando expulsó a las fuerzas leales del presidente palestino y comenzó una división que dura una década.
