Foto: Archivo Referencial
La fiscal general de Nueva York, Letitia James, demandó este martes a Juul, el mayor fabricante de cigarrillos electrónicos en EE.UU., por publicidad engañosa que contribuyó con la “epidemia” del vapeo entre los jóvenes y vendió sus productos a menores de edad a través de su página web y terceros, insistiendo en que esta empresa ha convertido el vapeo en algo glamuroso y ha tergiversado la presentación de sus productos como una falsa alternativa más “saludable” a los cigarrillos tradicionales.
Según un comunicado de la Fiscalía, Juul ha adoptado las mismas prácticas que las grandes compañías tabaqueras, lo que “ha causado que un gran número de jóvenes de Nueva York se haya vuelto adicto a la nicotina”, reconociendo que en todo el país aproximadamente 4,1 millones de estudiantes de instituto y otros 1,2 millones de colegiales fuman cigarrillos electrónicos.
Con esta demanda, Nueva York se une al estado de California, que el pasado lunes denunció a la multinacional alegando también que la empresa comandada por K.C. Crosthwaite dirige su publicidad a jóvenes y adolescentes.
“No hay ninguna duda de que la publicidad agresiva de Juul ha contribuido significativamente a una crisis de salud pública que ha causado que jóvenes de Nueva York y de todo el país se hayan hecho adictos a sus productos”, aseguró James.
La demanda sostiene, además, que la campaña publicitaria de Juul incluye imágenes brillantes, coloridas y con la presencia de jóvenes modelos atractivos dirigidas a los menores de edad, a quienes también trata de enganchar con productos de sabores.
Citando datos del Departamento de Salud del estado, el comunicado apunta que en torno a un millón de residentes en Nueva York usa los cigarrillos electrónicos, de los cuales 220.000 son menores de 18 años, y a nivel federal, un total de 42 personas han perdido la vida y otras 2.172 han sufrido graves enfermedades vinculadas al vapeo, entre ellos 146 ciudadanos del estado de Nueva York,.
