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Un avión con personal diplomático de Estados Unidos y otros ciudadanos estadounidenses ya ha salido de la ciudad china de Wuhan, epicentro del brote de coronavirus, informó este martes a Efe un portavoz del Departamento de Estado.
“El vuelo de Wuhan ha salido”, se limitó a decir la citada fuente.
Se espera que los estadounidenses lleguen al aeropuerto de internacional de Ontario, en el estado de California y a unos 65 kilómetros de Los Ángeles, aunque por el momento no hay confirmación oficial por parte de las autoridades federales, explicó a Efe David Wert, portavoz del condado de San Bernardino, donde se halla el aeropuerto.
“Estamos preparados para que, si llegan aquí, podamos darles toda la asistencia que puedan necesitar y para separarlos del resto de la población”, indicó Wert, que aseguró que también están preparados para atender a los niños que puedan venir en el vuelo.
Este fin de semana, el Departamento de Estado anunció que estaba organizando un vuelo chárter expresamente destinado a evacuar a su personal diplomático de Wuhan. Además, en esa aeronave, podrán viajar los ciudadanos estadounidenses que quieran costearse el billete a título personal.
El Gobierno de EE.UU. ha aconsejado a sus ciudadanos evitar los viajes a China y, expresamente, recomienda no trasladarse a la provincia china de Hubei, cuya capital es Wuhan.
De momento, las autoridades han confirmado la existencia de cinco casos de coronavirus. Se trata de personas que habían viajado recientemente a Wuhan y por el momento no se han detectado casos de propagación de persona a persona.
Además, United Airlines este martes anunció en un comunicado la suspensión de algunos vuelos desde EE.UU. con destino a Pekín, Shanghái y Hong Kong entre el 1 y el 8 de febrero debido a un “significativo descenso en la demanda” de billetes.
El nuevo coronavirus, causante de la neumonía de Wuhan, ya ha dejado 106 muertos entre los cuales al menos 4.515 infectados diagnosticados tan solo en China.
La llamada neumonía de Wuhan recuerda la crisis que provocó hace casi dos décadas el virus de Síndrome Respiratorio Agudo Grave (SARS), genéticamente similar a este nuevo coronavirus y que dejó más de 600 muertos en China. Efe