Los árboles de Joshua, el símbolo de los desiertos del oeste estadounidense que pueden vivir hasta 300 años en temperaturas extremas, se extinguirán a fines de siglo a causa del cambio climático, que afecta su hábitat y lo deja sin agua.
La preocupación por entender los problemas que enfrenta esta especie frente al cambio climático llevó a los científicos de UCR ha convocar a expertos y decenas de voluntarios para recopilar datos sobre más de 4.000 árboles, tal como explicó a Efe Jules L. Bernstein, vocera de la institución.
Los investigadores proyectaron varios escenarios futuros para la especie, según la escala de esfuerzos por combatir el cambio climático.
La ecologista y directora del proyecto Lynn Sweet subraya en un informe que “el destino de estos particulares y sorprendentes árboles está en las manos de la comunidad”.
“Sus números disminuirán, pero cuánto depende de nosotros”, agregó la investigadora sobre los árboles de Joshua, ubicables en California, Arizona, Utah y Nevada.
De acuerdo con los expertos, uno de los mayores problemas que afrontan son las severas sequías que se registran en estás áreas, donde la última de ellas se extendió por 376 semanas.
El estudio encontró que en las zonas más cálidas y secas los árboles adultos no producen tantas plantas jóvenes, y las plantas que llegan a nacer no sobreviven porque no son capaces de mantener las reservas de agua que los ayude a enfrentar periodos extensos de sequía. EFE