El estrés es bueno en forma moderada porque fomenta la creatividad y la satisfacción, pero si es crónico puede causar trastornos emocionales y enfermedades, advirtió este lunes una especialista.
Esta condición, aseveró, es una respuesta automática y natural del cuerpo ante situaciones desafiantes y los cambios positivos, negativos o imaginarios pero es necesario tenerlos para “tener estímulos y accionar ante la vida diaria”, expuso.
Explicó que el estrés es generalmente detonado por separaciones, pérdidas, cambios de trabajo, casa, escuela, acontecimientos que ocurren de forma inesperada, hablar en público, el tráfico vehicular, un viaje, exceso de actividades y la incertidumbre.
Entre los principales síntomas del estrés crónico, Robledo destacó la tensión muscular, cefalea localizada en la nuca, malestar estomacal, sequedad de boca, taquicardia, falta de aire y temblores.
Del mismo modo, también se pueden dar signos emocionales como irritabilidad, impaciencia, nerviosismo, falta de concentración, negativismo (percepción de una vida gris) y falta de interés con disminución del deseo de realizar actividades que antes eran consideradas placenteras.
Las señales también pueden ser de comportamiento, como trastornos del apetito, abuso de drogas, insomnio, ansiedad con ataques repentinos de “acelere” y malas relaciones interpersonales.
La terapeuta señaló que para manejar el estrés se pueden practicar la respiración con los ojos cerrados ya sea diafragmática o por la nariz.
Además, sugirió adoptar el hábito de practicar estos tipos de respiración cada día, acostados en el suelo, después levantarse.
También aconsejó la relajación muscular progresiva, que consiste en tensar cada parte del cuerpo para luego liberarla, así como reír con frecuencia. Efe