Foto: Twitter @BernandoAGuerra
El cierre de las salas de hospitalización y la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) por parte de la Secretaría Seccional de Salud de Antioquia, produjo que el Hospital San Rafael de Itagüí limitara sus servicios y no recepcionara a los pacientes desde el pasado 3 de diciembre.
La medida se tomó tras la realización de un control de cumplimiento de estándares de calidad en el hospital de segundo nivel, donde se encontraron fallas en las normas básicas, como que la UCI comparte el espacio con la Unidad de Cuidados Especiales (UCE), una situación que pondría en riesgo a los pacientes que se encuentran en cada una de estas salas; además, en una de sus sedes no existe la Unidad de Rayos X, ni de servicio transfusional, por lo que el establecimiento no estaba siguiendo algunos requisitos específicos.
El coordinador de cirugías Hernando Muñoz hizo un llamado a la secretaría, ya que tras la crisis financiera que vive el hospital no deberían aplicarse normas tan estrictas, pues según él debería comprenderse la situación de quienes trabajan y son atendidos allí: “nosotros ya contamos con servicio transfusional las 24 horas en la Sede 1. Cuando se requiere en la Sede 2, traemos lo que sea necesario porque estamos a dos cuadras. Es un asunto de eficiencia. Con el cumplimiento de la norma, vamos a tener que duplicar gastos para los cuales no tenemos capacidad”.
Por su parte, el gerente del hospital, el doctor Carlos Carmona explicó que hace 8 años se encuentran en una crisis financiera por falta de pagos y que cuando él asumió el cargo hace tres, el déficit financiero era de 25 mil millones de pesos: “algunas de esas entidades han sido cerradas y la deuda nunca fue saldada. Saludcoop y Cafesalud cerraron debiéndonos $3.000 millones, cada una. Sobre eso, nadie nos ha dado respuesta”.
