El plan de acción para atajar el cáncer en México debe incluir un mayor peso de la oncología en las escuelas de medicina, una mejor colaboración entre instituciones y concienciar al ciudadano sobre la necesidad de acudir al médico, coincidieron hoy varios expertos.
“La capacidad de cualquier sistema nacional de salud sin lugar a dudas depende de la producción de recursos humanos”, afirmó el doctor Germán Enrique Fajardo durante el foro “Cáncer, desafíos en México y América Latina”, organizado por la Agencia Efe y el diario El Universal.
“Tenemos una menor producción de médicos expertos en oncología”, lamentó Fajardo, quien precisó que estos suman 1.700 en todo el país, con 44 egresos anuales en cirugía oncológica.
Además, Solo el 10 % de 160 escuelas de medicina “tienen oncología como materia en la formación”, agregó Fajardo.
El problema, además, no solo atañe a la cantidad de oncólogos disponibles en el país, sino a su distribución.
“Si quieres una atención oncológica, la cosa se va complicando. No solo por estructura, sino por recursos humanos”, aseveró.
La solución pasa por hacer planear de manera gradual la repartición de personal cualificado por el país, algo que, para Fajardo, no resulta tan sencillo.
“No solo estamos formando médicos, sino que luego necesitamos emplearlos”, agregó el experto, evidenciando las carencias en el sistema y la falta de incentivos necesarios para que un médico especialista formado se ponga a trabajar de manera inmediata.
Otro de los ponentes, Román Rosales, aseguró que, independientemente de que exista un sistema de salud competente, “el punto de partida fundamental es de la sociedad”, que debe “asistir oportunamente al médico”.
El doctor Pedro Mario Escudero coincidió en que “la medicina preventiva” es de vital importancia para acabar con el cáncer, que cada año cobra 80.000 vidas en el país, así como la educación del ciudadano medio en materia de salud.
“Si siguen las cosas así va a ser muy difícil que un sistema por sí solo pueda dar respuesta” a esta problemática, aseguró el experto, quien llamó al ciudadano a acudir a su médico periódicamente.
Escudero destacó que las políticas en la materia deben ir enfocada a los tumores “más frecuentes”. Además, “debemos preguntarnos qué tenemos que trabajar en el conjunto para tener resultados más oportunos”, dijo.
“Se requieren estrategias multidisciplinarias”, apuntó Rosales, para después sugerir “el control de la exposición a factores de riesgo” o “impulsar estrategias de diagnóstico temprano”.
“Promovemos la revisión médica periódica en toda la población, pero en especial de los niños y las mujeres embarazadas”, puntualizó.
Se ha diseñado un programa de detección oportuna, ya que el 60 % de los procesos neoclásicos pueden atajarse “si son diagnosticados en sus fases más incipientes”, explicó Rosales.
Los expertos también llamaron a paliar, a través de la colaboración, los efectos negativos de un sistema de salud fragmentado en varias instituciones.
“El intercambio de servicios razonado y planeado puede ayudar a resolver una gran cantidad de problemas al respecto”, zanjó Fajardo.
El doctor Abelardo Meneses dijo que tras la implementación de un registro nacional de cáncer, el siguiente paso será “ir por el programa integral de prevención y control de cáncer, que es necesario en el país para amortiguar el peso y la carga de la enfermedad”.
“El camino y todo lo que falta por hacer es todavía una brecha muy importante”, ya que para el 2030 se incrementarán en un 66 % los casos de cáncer, finalizó Escudero.
